Pasaron más de 48 horas desde que el Senado rechazó los dos pliegos de Javier Milei para la Corte Suprema y -pese a que hasta ahora optó por el silencio público- hay indicios claros de que Manuel García-Mansilla (que fue nombrado en comisión por decreto y prestó juramento en el máximo tribunal) renunciaría a su sillón en el cuerpo.
El Gobierno sufrirá así una derrota completa, sin premio consuelo, y dará por terminada la trama que inició un año atrás con este tema..